Beneficios y Objetivos

Los beneficios pueden ser múltiples:

Físicos  
Está demostrado que las personas que están en contacto con un animal se recuperan más rápidamente después de una intervención o de una enfermedad grave. El deseo y la motivación por contactar con el animal promueve el ejercicio, hay una mayor disponibilidad al movimiento físico, mayor control motriz.

El contacto con animales a través de la vista, oído, y tacto disminuye el estrés y la excitación, la presión arterial y la frecuencia cardíaca en adultos y niños. Hay estudios que demuestran que cuando una persona conversa con otra su presión arterial es mayor que cuando lo hace con su perro o su gato. 



Psicológicos
Un animal es fuente de cariño, compañía y soporte emocional, características muy importantes en la vida de un ser humano. Estas características son innatas e incondicionales en un animal: él siempre está allí, pase lo que pase, no juzga a las personas según aspecto físico u otras características atribuibles al mundo humano. El afecto incondicional que manifiesta inspira seguridad, atención, intimidad y sensación de aceptación a las personas. 

Estas características propias del animal consiguen facilitar de una manera lúdica y agradable el aumento de la autoestima y las interacciones sociales, disminuyendo el  índice de depresión, de actitudes estereotipadas y comportamientos agresivos o manifestaciones de hiperactividad.

Los Programas Asistidos con Animales son valorados de forma muy positiva por especialistas de todo el mundo porque:

- Facilitan la adquisición de confianza.

- Desarrollan sentimientos de empatía hacia otros. 

- Impulsan el desarrollo de la autonomía.

- Permiten descargar energía y tensión retenida obteniendo como resultado una mayor alerta mental, mayor y mejor comunicación, seguridad y sensación de sentirse útil.

- Es significativo el aumento de los períodos de atención y la forma en que se trabaja la afectividad. Todos sabemos que es muy importante sentirnos queridos y poder demostrar cariño hacia alguien que en este caso nos muestra con su presencia un amor incondicional, característica, ésta, de nuestro animales.


Sociológicos
- Un animal facilita las relaciones sociales. Al ser objeto de interés facilita la comunicación con los demás, existiendo una mayor búsqueda de contacto y ganas de interactuar con los demás.

- Ocuparse de un animal, facilita asumir responsabilidades.

- Se trabaja la habilidad de compartir que ya que animal no pertenece a un niño o adulto en concreto aunque puede llegar establecer vínculos afectivos con cada uno de ellos.

- Se logra una mayor sensibilidad hacia el otro, son conscientes de que sus gestos o gritos pueden asustar a aquél con quien desean relacionarse. De esta manera aprenden a tener un mayor control para respetar las necesidades de sus nuevos amigos.


Los objetivos  pueden abarcar diferentes niveles según la necesidad:


Cognitivo
Memorizar el nombre del animal, las ordenes que conoce, la edad, el sexo, focalizar la atención sobre el animal, individulizar las partes del cuerpo, inventar una historia…

Educativo
Aprender a conocer a los animales, sus costumbres, necesidades, cómo curarlos….

Comunicativo
Hablar y escribir sobre el animal, dar órdenes gestuales y verbales, expresar la comunicación postural del animal…

Socialización
Interacción con el animal, jugar con él, hablar del animal y de sus costumbres a los demás…

Motriz
Acariciar, cepillar, poner y quitar la correa, tirar la pelota, pasearlo…

Responsabilidad
Dar de comer, saber cuándo hay que darle de beber, preparar al animal el sitio donde tiene que descansar…

Psicofisiológico
Relajación junto al animal, tumbarse y escuchar los latidos y la respiración del animal….